Invertir tu sueldo en la Bolsa de Valores te puede dejar jugosos rendimientos.

Si tú, como muchos de nosotros, eres un Godínez (asalariadus empedernidus que habita en las profundidades de una oficina y se alimenta básicamente de comida en tuppers para calentar en horno de microondas), entonces vives esperanzado a la llegada de un único y glorioso momento cada quincena o mes: el pago de nómina.

¿Pero qué sucede cuando por fin “cae” el dinero por el cual trabajaste de sol a sol? ¿Te lo gastas de inmediato, esperando poder sobrevivir hasta el próximo pago? Quizá ahorras algo, pero vas más lento de lo que quisieras. O simplemente ya lo debes (¿recuerdas esa venta nocturna a meses sin intereses?)

Aunque ahorres una parte de tu sueldo en tu cuenta nómina o en una de ahorros, debes tener en cuenta que existe un villano en esta historia: la inflación… o lo que es lo mismo, tu dinero pierde valor día con día.

Por eso y para contrarrestar este pequeño-gran detalle, es importante que lo diversifiques y lo inviertas en activos que generen utilidades; dicho en español, “no pongas todos los huevos en la misma canasta». Los diferentes instrumentos que cotizan en la Bolsa Mexicana de Valores, por ejemplo, te dan rendimientos que jamás obtendrías al dejar tu sueldo estancado en la cuenta donde te lo depositan, ya que este tipo de cuentas fueron creadas como receptoras más no para generar crecimiento.

Invertir tu nómina: una buena opción

Una manera de hacer que tu salario gane mayor interés y crezca más rápido que teniéndolo en tu cuenta de nómina tradicional, es invertirlo directamente en los mercados bursátiles. Diferentes bancos e instituciones ofrecen esta posibilidad; evalúalos y opta por el que más te convenza, pero sobre todo por el que te permita saber en qué estás invirtiendo y decidir en todo momento qué acción tomar. Una buena opción es Kuspit, la primera casa de bolsa 100% online de México.

Así funciona: cuando depositas tu nómina en tu cuenta Kuspit, automáticamente se invierte en “fondo barrido”, es decir, en fondos de inversión que te dejan un pequeño rendimiento. Sin embargo, también tienes la opción de invertir el efectivo de tu nómina en instrumentos de deuda (CETES) o renta variable (Acciones) para obtener mayores utilidades. De cualquier manera, el efectivo que no inviertes en estos últimos se reinvierte todos los días en “fondo barrido”, pudiendo disponer de él cuando lo necesites y por el monto que requieras.

Ahora que ya sabes cómo y por qué invertir tu salario, ahí te van 3 formas de hacerlo y no morir en el intento:

1. Puedes formarte el hábito de invertir una parte de tu sueldo (los expertos recomiendan entre el 10 y el 30 por ciento, dependiendo de tus objetivos y capacidad de ahorro) con sólo realizar una transferencia electrónica de tu banco a tu cuenta Kuspit.

2. Si te conoces y sabes que el ahorro no es precisamente tu fuerte, lo mejor es que hables con tu banco para domiciliar la transferencia cada quincena o mes. Así, cierta cantidad de tu sueldo será depositada automáticamente en tu cuenta Kuspit cada día de pago y no tendrás la tentación de gastarlo.

3. También puedes solicitar en tu empresa que te depositen el pago de nómina directamente en tu cuenta Kuspit.

Algunos bancos dan acceso a fondos de inversión de las mismas instituciones a partir de un mínimo de $1,000 pesos, pero en Kuspit puedes empezar a invertir con mucho menos que eso, ¡desde sólo $100 pesos!

Si quieres hacer crecer el dinero que ganas con el sudor de tu frente, abre tu cuenta en línea, gratis y en menos de 5 minutos en www.kuspit.com

*Publicado originalmente en Guiametro.
*La presente información no constituye una recomendación de compraventa o retención de cualquier valor en el mercado financiero, ni sugiere una estrategia de inversión en particular.